22/6/12

"Placita Típica". Encuentro con la realidad.

El primer semestre 2012 en la Escuela de Arquitectura se cerró con un gran aporte a la sociedad salvadoreña. Inicialmente había planeado la cátedra con un nivel de complejidad mayor sin embargo, la circunstancias y la propuesta de un trabajo de proyección social universitaria, dieron un giro al desarrollo de "Diseño Arquitectónico 4".

Así comenzó un proyecto pensado para ser concluido en dos períodos académicos, la llamada "Placita Típica" consistía en un replanteamiento del actual mercado de Apaneca que aparentemente mostraba una necesidad de cambio de imagen con un objetivo claro para quienes solicitaron ayuda a la Escuela: Transformar el espacio en un polo de desarrollo turístico para la ciudad. Para iniciar el proceso se hizo una visita de campo para recabar información sobre tres aspectos del contexto local: lo físico, lo urbano y lo social, es en este último en donde se pudo encontrar una gran deficiencia en el sentido de comunidad, la cual refleja ser de los problemas de mayor incidencia en la zona.

El actual mercado de Apaneca se ubica frente al parque central en una posición privilegiada dentro del contexto urbano por su proximidad a la alcaldía, la iglesia, la escuela y el parque mismo; siendo entonces un proyecto que, desde el punto de vista urbano, se perfila como fundamental en el desarrollo turístico y comercial del lugar; esto, aunado a las condiciones físicas de Apaneca tales como: clima, vistas a montañas alrededor y vegetación, convierten el entorno en el sitio ideal para desarrollar un proyecto de esta índole. Sin embargo, la disposición de los edificios componentes del actual mercado no responden a estas condiciones al emplazar uno de ellos separando el espacio interior esencial del espacio público circundante. Así es como se detectó que esta condición, había provocado segregación en los vendedores al no promover la actividad comercial en forma equitativa.



Las propuestas fueron concebidas en forma integrada al parque central, considerando los edificios de la "Placita Típica" como entes fundamentales de la ciudad. Los resultados arrojaron como recomendación general el trabajar de un modo participativo, haciendo que vendedores y usuarios sean parte importante en la toma de decisiones de la municipalidad. Finalmente se destacó que los proyectos contienen una intención clara de generar un "sentido de comunidad" como respuesta a la deficiencia social detectada y a la vez se integran en forma armoniosa aprovechando las condiciones físicas de clima, vistas y vegetación, lo cual hace que estas propuestas sean amigables con el medio ambiente.

  • Las imágenes de esta entrada pertenecen a alumnos de la cátedra de Diseño Arquitectónico 4

2/6/12

Un ejemplo a seguir.


El trasladar la cotidianidad hacia un contexto distinto de lo habitual ha sido lo que permitió, en esta vacación, aprender mucho más de la diversión. Una ciudad que luego de trece años ha conseguido cambios notorios en cuanto a mentalidad y cultura popular, la cual se expresa a través de la apertura de espacios públicos en los que la convivencia entre los seres humanos es la actividad principal.

En palabras de mi tía (ciudadana estadounidense residente en NYC) "Nueva York sufrió de un drástico cambio de actitud entre las personas". Durante los atentados del 9/11, los neoyorquinos se vieron envueltos en una impotencia ante esta catástrofe, que movió a muchos a ser solidarios con el sufrimiento de los menos afortunados, esto aparentemente dio pie al nacimiento de un alto sentido de tolerancia, aceptación e integración entre todo tipo de personas, actividades y creencias, lo cual ha repercutido directamente en las actividades de la ciudad. El derribo de las antiguas Twin Towers no fue un hecho aislado, gran parte de las aceras, plazas, calles en incluso algunos pequeños edificios localizados en el Downtown Manhattan se vieron soterrados en medio de polvo, cenizas y pedazos de estructura provenientes del viejo WTC, pero no se trata de una tragedia física. El mal estado en que quedó esta parte de la ciudad hizo que la industria inmobiliaria de la zona entrara en una crisis tal que hubo que evacuar a cientos de familias localizadas en los edificios circundantes a la entonces conocida "Zona Cero", la mayoría de las familias decidieron vender sus propiedades y mudarse al norte de la ciudad de Nueva York mientras que muchas empresas -por temor a ataques- deciden construir sus nuevas instalaciones en la cercana Nueva Jersey. Once años más tarde el Downtown Manhattan está en constante reconstrucción, habilitando y remodelando espacios públicos y privados que reflejan la nueva actitud neyorquina: integración ciudadana.

Nueva York es, en términos generales, un amplio espectro social con un sutil control moral de algunas acciones que se consideran denigrantes, pero que sin embargo no excluye la diversidad de la que se compone y se nutre una sociedad que busca recuperarse de la vulnerabilidad a través del espíritu solidario con la ciudad. Para quienes venimos de sociedades menos permisivas resulta dificil adaptarse a la idea de la multitud variada en los componentes del contexto social, pero con el tiempo, se llega a comprender la riqueza de la que una ciudad goza al mezclar sanamente diferentes razas, credos o religiones, orientaciones sexuales e incluso nacionalidades. Todo con el fin de abonar al desarrollo individual y colectivo de las personas.

Bajo esta perspectiva, puede comprenderse el sentido real de la remodelación de una plaza, un corredor costero o un parque natural; y también puede comprobarse esto a través de las actividades que se desarrollan en estos espacios, como son la lectura, el teatro, el cine, la música y la gastronomía. Sin duda un ejemplo a seguir para sociedades como la nuestra en la que nos vemos envueltos en un estira y encoge político que al final no logra resultados beneficiosos para nuestras ciudades.